Recuperar su cuerpo lentamente. Sentarlo encima una roca plana y hacerle mirar hacia las montañas. Hemos de darle una razón para que quiera seguir existiendo. ¿Una nueva fe? ¿Un nuevo amor? ¿Vivir por amor a la vida en sí y sin otra expectativa más que vivir? La vida en sí. Abrazarse a la vida en sí y respirar a fondo. Lo único existente, palpable. La sangre comienza a circular. El placer de vivir por vivir. La vida por la vida. Nunca había pensado en tal idea. Una idea más. Una idea que pasa a ser carne y hueso. Tierra fresca. Océano. Turbulencias. Cada instante de vida es un instante de eternidad.
Hemos podido resucitarle.
Es un cuerpo que vuelve a caminar
Que vuelve a cobrar energía
Recuperar fuerzas
Empatía, simpatía, apetencia, potencia
El cuerpo sigue erguido y mira hacia el frente.
La vida por la vida.